El activista Nyombi Morris se vio forzado a pedir asilo político al defender a su hermana lesbiana de las rígidas leyes anti-LGBT+ del país africano.
Nyombi Morris, un activista originario de Uganda, se ha enfrentado a amenazas y acosos en su país por apoyar a su hermana lesbiana.
El joven de 26 años, que se desempeña como un activista climático, tuvo que huir de la nación africana después de enfrentar horribles amenazas debido a su apoyo a los derechos LGBT+.
Además de su trabajo con Earth Volunteers, una organización ambiental sin fines de lucro, Nyombi ha abogado por los derechos de la comunidad LGBT+ en Uganda. Aunque él se identifica como heterosexual, su hermana, quien es lesbiana, fue «descubierta» y expulsada de la escuela.
El activismo medioambiental de Morris, sobre todo en las campañas contra el oleoducto de África Oriental (EACOP), ya le habían generado amenazas en el pasado. Posteriormente, periódicos sensacionalistas comenzaron a señalarlo de ser gay y “promover la homosexualidad» en Uganda.
Las severas leyes anti-LGBT+ en Uganda
Mortis afirma haber sentido temor de ser procesado por la rígida ley anti-LGBT+ de la nación africana. Esta ley fue firmada por el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, en mayo de 2023. Dicha ley castiga la “homosexualidad agravada” con la pena de muerte e impone cadena perpetua por “reclutamiento, promoción y financiación” de personas del mismo sexo.
La ley ha sido condenada rotundamente por organizaciones de derechos humanos a nivel internacional, incluyendo al presidente de Estados Unidos Joe Biden y el Papa Francisco.
La madre y los familiares de Morris también ha sido objeto de amenazas e intimidación. Morris recibió una llamada anónima en la que lo amenazaban con violarlo y arrestarlo.
Respuesta internacional
El joven ha pedido asilo a Dinamarca. Morris declaró:
“No puedo regresar a Uganda porque políticamente no estoy en sintonía con el gobierno, y eso me pone en peligro”.
Roland Ebole, de Amnistía Internacional, ha alzado la voz respecto a este tema:
“Debido a la naturaleza punitiva de la Ley Antihomosexualidad, los defensores de los derechos humanos y los activistas políticos enfrentan la amenaza de ser acusados de ser LGBTQ+, solo para amordazarlos o intimidarlos para que guarden silencio”
Mientras espera una decisión sobre su estatus de asilo en Dinamarca, Morris reveló que su cuenta bancaria ha sido congelada y que apenas puede cubrir sus necesidades básicas con el estipendio proporcionado por el gobierno del país.
