La arquidiócesis de Puebla que encabeza el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa emitió un pronunciamiento en el que llama a que se mantenga la legislación actual. Esto debido a la reciente aprobación en comisiones del Congreso del Estado de una reforma al artículo 297 del Código Civil que permite los matrimonios entre personas del mismo sexo.
Explica que, aunque la iglesia no reconoce las uniones homosexuales tampoco rechaza una ley de “sociedades de convivencia” o de “uniones civiles”, sin ser llamado matrimonio, porque ofrece la posibilidad de proteger un bien social atendible, como recibir seguridad social, prestaciones laborales, atención en la enfermedad o protección para no quedar desamparado a causa de alguna incapacidad, o eventualmente pueda llegar a tener participación en una herencia.
“Estas leyes serían no sólo para personas homosexuales, sino también para personas de diferente sexo, no casadas, que deciden compartir su vida y sus bienes”, destaca la arquidiócesis.
Además, la arquidiócesis destacó que el matrimonio debe ser exclusivo “entre un solo hombre y una sola mujer” y manifestó la importancia de atender problemas que requieren de una “atención prioritaria” como la garantía de la seguridad, la salud para todos, la educación de calidad, el trabajo digno o el fortalecimiento de la familia como célula de la sociedad.
La diócesis poblana destacó que, desde el punto de vista social, el matrimonio formado por un hombre y una mujer merece una especial protección porque es la base de la familia que a su vez da origen y forma a la sociedad.
Cabe señalar que este martes 3 de noviembre se votará en el Pleno del Congreso del Estado de Puebla la iniciativa de manera definitiva, por lo que se espera que las diputadas y los diputados que voten a favor de la igualdad y el respeto a las diferencias, que eleven su hacer legislativo por encima de creencias personales, ideologías partidistas, adherencias religiosas y de la homofobia.
