Hace unos meses les informamos de un escándalo que involucraba a varios sacerdotes católicos y autoridades de la Iglesia Católica en Polonia.

Se supo que un sacerdote organizó una orgía gay y que uno de los asistentes era un trabajador sexual que tuvo un consumo problemático de sustancias por lo que presentó una emergencia médica.

El sacerdote no va a ir a la cárcel por gay ni por hacer orgías, su condena de 18 meses en prisión se debe a que no llamó a la ambulancia al ver que el trabajador sexual estaba en necesidad médica y no llamó a las autoridades.

Sentencia de 18 meses en prisión y relevamiento de funciones sacerdotales

El ex sacerdote católico polaco Tomasz Z. fue condenado a 18 meses de prisión por negar auxilio a un trabajador sexual que cayó en emergencia médica en una orgía gay por abuso de drogas que él sacerdote organizó. 

Además, fue declarado culpable de cuatro delitos, incluido el uso de drogas ilegales y aprovecharse de la indefensión de otra persona para inducir a mantener contacto sexual.

La orgía gay tuvo lugar en la residencia parroquial del santuario de la Virgen de los Ángeles, en Dąbrowa Górnicza (sur de Polonia), donde varios sacerdotes participaron en la orgifiesta. 

Cuando el trabajador sexual presentó la emergencia médica por abuso de sustancias el párroco se negó a permitir el ingreso de la ambulancia, lo que desencadenó la intervención de la policía y su posterior detención y ahora condena.

Tras el escándalo, Tomasz Z. fue relevado de sus funciones como párroco y optó por pasar un tiempo en Turquía debido a las críticas recibidas. 

En sus redes sociales, atribuyó las críticas a «ataques contra la Iglesia, el clero y los creyentes».

El juicio se desarrolló a puerta cerrada, y se determinó que el ex sacerdote debe compensar a la víctima con alrededor de 4,000 euros.