Mientras el papa Francisco viajaba a Roma, ofreció una breve conferencia de prensa a algunos medios, mismos que informaron que el sumo pontífice habría recomendado a los padres cuyos hijos tienen tendencias homosexuales, llevarlos con un psiquitara.
Tras lo ocurrido, el Vaticano decidió eliminar dicha declaración de los medios asegurando que no querían que se mal informara sobre lo ocurrido: “Cuando el papa se refiere a psiquiatra, está claro que quería dar un ejemplo sobre las diferentes cosas que se pueden hacer. El pontífice no quiso, en ningún momento asegurar que la homosexualidad es una enfermedad pssiquiátrica“, aseguró la española Paloma García Ovejero.
El papa fue cuestionado sobre qué hacer cuando un miembro de la familia, en particular un hijo, se declara abiertamente homosexual, a lo que él respondió: “Les diría, en primer lugar, que recen, que no condenen, que dialoguen, entiendan y que den espacio al hijo o a la hija. Cuando eso manifiesta desde la infancia, hay muchas cosas por hacer por medio de la psiquiatría, para ver cómo son las cosas. Otra cosa es cuando eso se manifiesta después de los 20 años“.
Tales declaraciones han despertado el enojo de varios grupos LGBT y asociaciones defensoras de los derechos humanos pues señalan que Francisco haya calificado la homosexualidad como una enfermedad mental.
