Brian Yael, un estudiante de la Universidad de san Luis Potosí, acude a su graduación como drag queen.
¡Brillando con turbina y título en mano, mis cielas!
Les chsimeo que, en la Universidad de San Luis Potosí se vivió un momentazo digno de pasarela y ovación de pie. Brian Yael, estudiante con un promedio más alto que tus tacones favoritos (¡9.5, reina!), fue a recoger su carta pasante como quien va a los premios: en draga, guapísima y empoderada, convertidx en Tavata, su fabulosa y orgullosa identidad artística. ¡Traz!
No fue un simple trámite, fue un statement, una coronación y una bofetada con guante de plumas a la normatividad. Tavata entró como se debe: con actitud, pestaña bien puesta, outfit de impacta y ese aire de “sí se puede, manas”. Porque aquí no solo se gradúa el promedio, también se gradúa el coraje de ser unx mismx.
Y sí, mientras algunxs iban con corbata y cara de “aquí no pasa nada”, Tavata lo dio todo con su presencia. Una aparición que no solo rompió estereotipos, sino que iluminó los pasillos de la universidad con glitter, autenticidad y mucho poder queer.
Este gesto poderoso no solo celebró el orgullo personal, también lanzó un mensaje claro: la diversidad también estudia, también se esfuerza, también triunfa. Y qué mejor forma de gritarlo al mundo, mis cielas.
Las redes, por supuesta, volvieron viral este suceso, con cientos de mensajes de apoyo, amor y admiración. Brian no solo se llevó su carta pasante, ¡también se llevó el cariño de todxs nosotrxs que aplaudimos la valentía y la excelencia!
Porque, hermanas, el maquillaje se quita, pero el orgullo se queda. Y Tavata lo dejó clarísimo: la mejor graduación es la que se vive siendo tú mismx.
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