La Asociación Nacional de Atletismo Interuniversitario (NAIA), responsable de supervisar a más de 83.000 atletas de universidades en los Estados Unidos, ha hecho público su nueva política en relación con la participación de mujeres trans en deportes femeninos, marcando un hito en el ámbito del deporte universitario en el país.
Política de participación en equipos femeninos
La nueva política establece que únicamente estudiantes atletas cuyo sexo asignado al nacer sea femenino podrán competir en los equipos deportivos femeninos patrocinados por la NAIA.
El Consejo de Presidentes de la organización votó de manera unánime, con 20 votos a favor y ninguno en contra, para aprobar esta política que entrará en vigor el próximo 1 de agosto.
Excepciones para hombres y estudiantes trans masculinos
La política también contempla excepciones para hombres transgénero y estudiantes trans masculinos, quienes podrán competir en equipos femeninos siempre y cuando no hayan iniciado una terapia hormonal masculinizante.
Aquellos que sí hayan comenzado dicha terapia no podrán competir en la NAIA, pero tendrán la oportunidad de participar en entrenamientos, prácticas y actividades de equipo de los equipos femeninos.
La participación de estudiantes trans, tanto hombres como mujeres, en equipos femeninos queda sujeta a la «discreción» de las universidades afiliadas a la NAIA. Sin embargo, todos los estudiantes, independientemente de su identidad de género, podrán competir en equipos masculinos según la política vigente.
Reacciones a la política
Jim Carr, presidente y director ejecutivo de la NAIA, expresó que la política se adoptó considerando lo mejor para las escuelas miembros, aunque reconoció que generará controversia. La NAIA supervisa a más de 200 escuelas y es la última entidad en el ámbito deportivo en restringir la participación de estudiantes trans.
Una más de las medidas anti trans en los Estados Unidos
En años recientes, la mitad de los estados en EE. UU. han implementado leyes o regulaciones que limitan o prohíben la participación de estudiantes trans en equipos deportivos acorde con su identidad de género.
La Human Rights Campaign (HRC) se ha manifestado en contra de la decisión de la NAIA, argumentando que esta restricción va en detrimento del deporte femenino y perpetúa estereotipos dañinos sobre atletas trans.