¡Esto es para celebrarse! Mis comadres del pleno de las Cortes Valencianas, aprobaron esta semana la Ley de Igualdad para el colectivo LGBT en el que quedan estrictamente prohibidas las terapias que quieran «corregir» la identidad de género u orientación.
La decisión fue celebrada por los miembros de la comunidad LGBT, y a su vez, se les informó que en caso de ser víctima de una de estos métodos arcaicos, pueden acudir a las instituciones correspondientes para recibir asesoramiento jurídico, y también se informó que quienes ejerzan estas prácticas no legales, serán sancionados con una multa de entre 60,00 y 120,000 euros.
Ante esta nueva resolución, existe una cláusula que indica que las autoridades podrán actuar de oficio, es decir, sin necesidad de una queja o denuncia contra las terapias que violentan los Derechos Humanos de las personas LGBT.
México, actualmente, cuenta con una propuesta ante el Senado de la República cuya finalidad es prohibir este tipo de violencia a la que algunos miembros de la comunidad LGBT son expuestos, sin embargo, aquí no se penalizará a los profesionales que ejerzan debidamente su labor, no así con aquellos que utilicen métodos y torturas para «corregir» la orientación o identidad de género de sus pacientes. A diferencia de la resolución de Valencia, En México se tendría que proceder por querella, esto quiere decir que la víctima tendría que presentar los cargos ante un juez, si es que así lo desea.
Es muy importante no desinformar, ya que han surgido muchos grupos cuya finalidad es atemorizar a la sociedad, esparciendo mentiras sobre esta iniciativa. No se pretende separar a las familias, al contrario, se pretende unir, amar, educar y reforzar el valor humano. Nadie quitará a los padres el derecho de educar a sus hijos, solo se busca expandir el panorama para normalizar la homosexualidad y que deje de ser un tema tabú para nuestra sociedad.
¡Queremos más familias que aman!
