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Le tiradore del Club Q en Colorado es acusade de delitos de odio en un tribunal federal

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Le tiradore del Club Q en Colorado es acusade de delitos de odio en un tribunal federal

Anderson Lee Aldrich, le atacante que en noviembre de 2022, disparó y mató de manera indiscriminada a 5 personas en el Club Q, antro al que acudía la comunidad LGBTQ de Colorado Springs, compareció el martes 16 de enero del 2024, ante un tribunal federal de los Estados Unidos, para ser acusade de delitos federales de odio.

Anderson Lee Aldrich, quién se identifica como una persona no binaria, de 23 años, se declaró no culpable de los cargos federales a los que se le acusa.

Aldrich fue trasladado a la Penitenciaría Estatal de Wyoming, debido a las preocupaciones por la seguridad del caso de alto perfil, según Alondra González, portavoz del Departamento Correccional de Colorado.

Los cargos que enfrenta Aldrich, incluyen múltiples infracciones federales por armas de fuego.

Aldrich se declaró culpable en junio 2023, en un tribunal estatal de cinco cargos de asesinato y 46 de intento de asesinato, uno por cada persona que se encontraba en el Club Q durante el ataque del 19 de noviembre de 2022.

Aldrich, se declaró no culpable de los cargos estatales por delitos de odio en virtud de un acuerdo de culpabilidad.

Los cargos federales son consecuencia de una investigación del FBI sobre el tiroteo que se confirmó tras la sentencia de Aldrich en un tribunal estatal. En ese momento, el fiscal de distrito Michael Allen dijo que la amenaza de la pena de muerte en el sistema federal fue «gran parte de lo que motivó a le acusade» a declararse culpable de los cargos estatales.

El fiscal señala que la afirmación de Aldrich de ser una persona no binaria forma parte de un esfuerzo por evitar cargos por delitos de odio, afirmando que no hay pruebas de que Aldrich se identificara como persona no binaria antes del tiroteo en el que asesinó a 5 personas.

Nuevos documentos judiciales muestran que Aldrich, ha llegado a un acuerdo para declararse culpable de 50 cargos federales por delitos de odio y 24 cargos por violación de armas, lo que supondría múltiples cadenas perpetuas además de una condena de 190 años de prisión. De esa forma Aldrich evitaría la pena de muerte.

Un detective de la policía testificó que amigos de juegos en línea dijeron que Aldrich expresaba odio hacia la policía, las personas LBGTQ y las minorías y utilizaba insultos racistas y homófobos. Uno de ellos dijo que Aldrich envió un mensaje en línea con una foto de un rifle apuntando a un desfile del orgullo gay.

El ataque de 2022 se produjo más de un año después de que Aldrich fuera detenido por amenazar a sus abuelos y prometer convertirse en «el próximo asesino en masa ″ mientras almacenaba armas, chalecos antibalas y materiales para fabricar bombas. Esos cargos fueron finalmente desestimados después de que la madre y los abuelos de Aldrich se negaran a cooperar con los fiscales.