El gobierno de Nueva Zelanda ha decidido revisar estas reglas luego de diversas quejas y reclamos por falta de equidad.
El gobierno de Nueva Zelanda anunció este miércoles 9 de octubre que realizará una revisión detallada a las reglas que rigen la participación de atletas trans en el deporte. Esto se deriva de las recientes críticas de deportistas olímpicos al gobierno. Y es que, según su opinión, las actuales leyes ignoran los derechos de las atletas femeninas y socavan la equidad.
Chris Bishop, Ministro de Deporte de la nación insular, solicitó Sport NZ, el organismo rector del deporte en el país, que se actualicen las directrices que alientan a lxs atletas trans a competir en el deporte de nivel amateur en el género con el que se identifican y sin la necesidad de demostrar o justificar su identidad.
El ministro señaló en un comunicado que los principios rectores actuales, publicados en 2022, no reflejan las expectativas legítimas de la comunidad al remarcar que el deporte no solo debe centrarse en la diversidad, la inclusión y la equidad, sino también priorizar la justicia y la seguridad.
«Es importante que las personas transgénero se sientan capaces de participar en el deporte comunitario, pero obviamente existen cuestiones difíciles con las que los organismos deportivos deben lidiar en torno a la equidad y la seguridad como resultado de esa participación».
Repercusiones de situaciones de los pasados Juegos Olímpicos
En el pasado mes de septiembre, más de 50 atletas olímpicos, médicos y otros representantes del mundo del deporte de la nación de Oceanía, denunciaron en una carta que las directrices actuales sobre la inclusión de las atletas trans, que no se aplican al deporte de élite, socavaban los «principios fundamentales de justicia y seguridad» en el deporte.
Todo esto viene a colación debido a la polémica que se suscitó en los pasados Juegos Olímpicos de París con la boxeadora argelina Imane Khelif, a quien la Asociación Internacional de Boxeo no permitió competir en los Mundiales, pero el Comité Olímpico Internacional si lo permitió, dejando claro que no se trataba de una mujer trans.
Ya en 2021, la controversia se había generado en Nueva Zelanda cuando Laurel Hubbard hizo historia al convertirse en la primera deportista trans del país en participar en una competición olímpica, durante las pruebas de halterofilia de Tokio 2021.