En 1981, la canción “Physical” de Olivia Newton-John se convirtió en un éxito mundial, convirtiéndola en un ícono para las poblaciones LGBT+.
¡Mis icónicas! La inesperada muerte de Olivia Newton-John nos ha recordado la gran estrella que fue, haciendo especial hincapié en lo importante y emblemático que se volvió su hit mundial “Physical” para las poblaciones LGBT+ alrededor del mundo.
En 1981, cuando este tema llegó a todo lo alto de las listas de popularidad, la carrera de mi Olivia Newton-John acababa de sufrir un duro golpe. El año anterior, la actriz había protagonizado Xanadú, un musical con canciones de la Electric Light Orchestra que fue un fracaso total.
Luego de esto, Hollywood no estaba con las intenciones de volver a incluirla, por lo que la diva australiana emprendió un nuevo proyecto discográfico. Uno que no solo habría de revalidar su éxito mundial, sino también poner punto final para siempre a su imagen de mujer tímida y mojigata, reemplazándola por la de una mujer desinhibida y actual.
Algo que llama la atención, es que Terry Shaddick y Steve Kipner, autores de la icónica “Physical”, habían compuesto la canción pensando en Rod Stewart sumido en su fase discotequera, y pensaban ofrecérsela a Tina Turner para que la interpretase.
Aquí, es donde viene la chisma sobre lo ocurrido, por un lado, según la propia Newton-John, mi Tina Turner pensó que la canción era demasiado sexual y decidió rechazar la oferta. Algo que nos cuesta creer, dado el repertorio de la artista. Por otro lado, Steve Kipner, afirma que Lee Kramer, el entonces manager de Newton-John, escuchó el tema por accidente y lo reclamó de inmediato para su clienta.
Durante la producción del tema, Olivia Newton-John pensó que estaba yendo demasiado lejos. La letra de la canción estaba llena de metáforas sexuales, realzados por una melodía de esas que invitan a acortar distancias en la pista de baile.
“Era una canción cruda y atrevida. ¿Tal vez era demasiado picante?”, declaró en algún momento Olivia.
Ver esta publicación en Instagram
El lanzamiento de Physical llevó consigo algo de Escándala, sobre todo en algunas zonas de Estados Unidos. Incluso la cantante llegó a plantearse retirar el tema, pero según le explicó Roger Davies, su nuevo manager, deshacerse de tamaño hit no tenía sentido. Había que seguir adelante con la ofensiva, y el siguiente paso sería complementarla con un videoclip para MTV.
En 1981, los videos musicales eran una relativa novedad, como también lo era practicar aerobics. Y, dado que la letra de Physical hacía mucho hincapié en cierta clase de ejercicios, el clip del tema aprovecharía ese doble sentido convirtiendo a Olivia en monitora de gimnasio.
El vídeo suponía un guiño de Newton-John a su público de hombres gays. Durante su metraje, la monitora Olivia se mostraba implacable con un grupo de señores con sobrepeso… y, una vez que los había transformado en pura masa muscular, descubría que estos están más interesados unos en otros que en ella.
De esta manera, mi comadre Newton-John no solo obtuvo un éxito descomunal (10 semana en el número 1 de las listas estadounidenses de singles). También se coronó como un ícono LGBT+.
Y ahora, con la partida de Olivia de éste mundo, no nos queda más que agradecerle tremendo temazo y abordaje de la representación queer, en una época donde era poco visto.
