El sacerdote húngaro Gergö Bese, ha sido suspendido de la Iglesia Católica tras darse a conocer su participación en un acto sexual gay.
¡Escándala en la Iglesia Católica manas! ¡Otra vez! Resulta que Gergö Bese, un sacerdote húngaro, muy cercano al primer ministro Viktor Orbán, fue suspendido por la Iglesia Católica después de que se revelara su participación en orgías gay.
Este lunes, la Diócesis de Kalocsa-Kecskemét decidió suspender al padrecito por órdenes de El Vaticano. Esta decisión es la más severa aplicada en el país.
Lo irónico del asunto es que Bese era bueno para andar haciendo campaña anti-LGBT+. El sacerdote habló muchas veces de los “peligros de la propaganda LGBTQ+”. El sacerdote señalaba también en sus discursos que “la familia tradicional se encontraba bajo ataque” por parte de los grupos liberales que promueven lo que él considera una “desviación de la normalidad”. Y ¡bolas! Que el padrecito resultó ser comadre.
Tras su suspensión el viernes, Bese eliminó sus perfiles en redes sociales y por medio de un comunicado reconoció haber cometido “un error”. Remató diciendo que “ha pecado contra la Iglesia” y su comunidad.
Y es que, según los medios locales, el cachondo padrecito no solo es asiduo a orgías gay, sino que también las habría grabado y subido contenido a plataformas de pornografía gay.
A tal grado ha llegado el escándalo que fuentes gubernamentales han sugerido que Bese abandone durante un tiempo el país.
¿Qué opinarán de este tema lxs que se rasgan las vestiduras por señalar a la comunidad LGBT+ por cualquier cosa y defender a capa y espada a estos señores tan hipócritas a los que van y hasta les cuentan sus «pecados»?
