A través de un video de Youtube, Jesús Donaire Domínguez es un sacerdote que se ha declarado homosexual.
¡Mis católicas! Jesús Donaire Domínguez es un sacerdote que decidió utilizar su canal de Youtube para declarar su homosexualidad. En el video relata la profunda depresión que sufrió antes de hablar abiertamente de su orientación sexual, razón por la que fue despedido de la iglesia en la que trabajaba.
Luego de 17 años en la iglesia católica, el también doctor en Teología Espiritual, decidió hablar abiertamente de su sexualidad.
«Me negaba a reconocer que algo no encajaba en mi vida, pero el conflicto interior en el que vivía aumentaba exponencialmente… hasta que llegó un momento en el que no supe gestionar el violento torbellino de emociones contradictorias y desagradables en que estaba sumergido, y sencillamente exploté», relata Jesús.
Aseguró que decidió compartir su testimonio para poder ayudar a otras personas que se sientan de la misma manera que él en algún momento. Jesús Donaire logró salir adelante con el apoyo constante de su familia, además de que decidió tomar terapia psicológica.
«En febrero de 2020 manifesté públicamente al arzobispo mi orientación homosexual, y consecuentemente fui apartado del ejercicio del ministerio sacerdotal y de las diferentes responsabilidades que desempeñaba en la diócesis, y aunque me ofreció la posibilidad de poder continuar ejerciendo el sacerdocio ministerial en otro lugar, ya no estaba dispuesto a seguir dentro del armario y a continuar con una vida sexual reprimida. Me hubiese encantado poder seguir siendo sacerdote y dedicarme con solicitud a los demás, pero mi decisión era firme e irrevocable, jamás volver a ocultar mi homosexualidad», declara enfáticamente.
Tras lo sucedido decidió hablar sobre lo que dice la iglesia respecto a la diversidad sexual y lo que realmente está escrito en la Biblia sobre el tema.
«Según la iglesia, en la Biblia existen relatos que supuestamente condenan y rechazan la homosexualidad. Esto no es cierto, en los textos bíblicos primitivos ni siquiera se utiliza el término homosexual. Lo que hace la iglesia para justificar su postura homófoba es acudir a esas traducciones que a lo largo de la historia ella misma a hecho de esos textos primitivos. Traducciones en las que el traductor eclesiástico ha incorporado términos y conceptos que no existían en el texto primitivo. Condenar la homosexualidad utilizando las Sagradas Escrituras es manipular la Biblia y traicionar el espíritu en el que ésta fue escrita», declara..
