¡Manas! Ahora si me petrifiqué al darme cuenta que un católico gastó una significativa cantidad de dinero para fiestas lujosas con drogas.
Un padre de iglesia italiano que robó de su iglesia para financiar orgías con drogas ya recibió una condena de tres años en prisión.
El padre Francesco Spagnesi, de 40 años, recibió una sentencia a tres años y ocho meses de cárcel después de que robó 100.000 euros (alrededor de 85.000 libras esterlinas) de su parroquia, gran parte de los cuales gastó en fiestas de sexo gay.
El sacerdote católico, quien fue arrestado en septiembre, también deberá devolver el dinero que robó.
La sentencia de Spagnesi se negoció como parte de un acuerdo de culpabilidad; se mantuvieron los cargos de tráfico, tráfico y apropiación indebida de drogas, mientras que se retiraron los cargos de intento de daño grave.
Los cargos de daño grave contra el padre se debieron a que presuntamente mantuvo relaciones sexuales sin protección con sus parejas sin decirles que era seropositivo.
Según los abogados del acusado, Spagnesi tomaba medicamentos antirretrovirales, lo que significaba que no podía transmitir el VIH, y el sacerdote agregó que siempre informó a sus parejas sobre su estado serológico.
Spagnesi recibió una destitución de sus funciones por la Diócesis de Prato, Toscana.
«Quería ser el pastor de mis fieles, guiarlos hacia los caminos del Señor, y terminé en el vicio y la perdición», dijo a un periódico italiano el sacerdote.
Alessio Regina, el novio de Spagnesi, recibió una condena de tres años y dos meses de cárcel por ser cómplice en la compra y venta de drogas.
Spagnesi es un ex estudiante de medicina que abandonó para unirse al sacerdocio a la edad de 26 años y, según los informes, dijo que encontró «plenitud y alegría al estar disponible para los demás».
Se le ordenó como sacerdote en 2007 y se le nombró párroco en 2009.
¿Cómo fue el arresto al sacerdote?
A Spagnesi se le arresto después de que a la policía se le informara de que su compañero de cuarto importó un litro de la droga GHB para «violación en una cita» de Holanda, según The Times.
Las sospechas surgieron cuando un contador parroquial descubrió que el sacerdote retiró más de 100.000 euros de la cuenta bancaria de la parroquia, dinero que la policía cree que se utilizó para comprar drogas para fiestas lujosas.
Cuando ya no pudo retirar dinero de esta cuenta, supuestamente comenzó a sacar dinero del plato de recolección y a solicitar dinero directamente a los feligreses, a quienes les dijeron que recaudaba dinero para familias de bajos ingresos.
«Ya no me reconozco, el vórtice de la cocaína me ha tragado. La droga me hizo traicionar a mis feligreses, me hizo decir mentiras, me hizo tomar acciones de las que me avergüenzo», expresó Spagnesi al periódico «Corriere Della Sera».
«Les pido perdón a todos», añadió.
Condanna di 3 anni e 8 mesi per don Spagnesi, il «prete pusher»: sconterà la pena ai s… https://t.co/UIThjyId0B pic.twitter.com/QOuWSBxer3
— Corriere della Sera (@Corriere) December 7, 2021