La nadadora estadounidense Lia Thomas no podrá participar en Juegos Olímpicos París 2024 tras perder batalla legal.
En un acto más de discriminación y de «estrechez de criterio», la nadadora estadounidense trans Lia Thomas pierde la oportunidad de participar en las próximas Olimpiadas.
Y todo manas porque la organización World Aquatics, que regula a los atletas de deportes acuáticos, prohibió competir en la categoría femenina.
Su restricción excluye a «aquellas que han pasado cualquier parte de la pubertad masculina».
Obviamente la afrenta va directamente contra las mujeres trans. Ya en 2022, a Lia se le había permitido competir en la liga universitaria estadounidense.
En esa competencia logró ganar un título en la categoría de 500 yardas.
Fue en enero pasado que Lia tomó acciones legales contra World Aquatics por sus medidas transfóbicas. Sin embargo, el Tribunal de Arbitraje Deportivo desestimó las acusaciones de Lia.
La instancia mundial de la natación declaró estar conforme con la decisión y la calificó como «un gran paso adelante en nuestros esfuerzos para proteger el deporte femenino. Ellos declararon:
«World Aquatics se dedica a fomentar un entorno que promueva la justicia, el respeto y la igualdad de oportunidades para los atletas de todos los géneros y reafirmamos este compromiso».
En 2023, World Aquatics, durante la Copa del Mundo de Berlín, decidió crear una categoría especial para incluir a deportistas transgénero o no binaries en las categorías de 50 y 100 metros en todos los estilos. Pero el plan fue suspendido por la falta de participantes.
Que lata con todo este debate de la inclusión de deportistas trans en las competencias internacionales. No las dejan participar como mujeres, pero tampoco crean categorías especiales ni nada.
