Los resultados indican la necesidad de acelerar prohibición de las terapias de conversión en Reino Unido.
Casi una cuarta parte (23.5%) de la población encuestada por la organización anti abuso «Galop» declararon que consideran que el abuso sexual experimentado ocurrió en un intento por convertirles o castigarles por su identidad. La sensación se incrementa si la víctima era asexual (34%), no binaria (32%), hombre trans (35%) o mujer trans (30%).
Galop analizó 1020 respuestas anónimas de personas LGBT+ de 16 años y más en el reporte emitido para el Reino Unido, que tuvo lugar en 2020.
Today, we launch our report into LGBT+ experiences of sexual violence.
Almost ¼ of victims had been subjected to sexual violence intended to ‘convert’ or ‘punish’ them.
We need to #banconversiontherapy now. https://t.co/K4XoUQ1ug6 pic.twitter.com/h6MTU3d79H
— Galop (@GalopUK) January 26, 2022
Leni Morris, CEO de Galop, dijo que los resultados señalan la «necesidad de una completa prohibición de las terapias o prácticas de conversión» en el Reino Unido, algo que se encuentra en la mesa desde el 2018, pero se ha seguido retrasando.
«Este es el más grande estudio de víctimas LGBT+ de abuso sexual en el Reino Unido hasta la fecha, y los resultados encontrados relacionados con la conversión y el castigo muestran que sigue siendo un problema constante y continuo», agregó Morris.
«Estamos tomando acción para endurecer seriamente la violencia y agresiones sexuales, y tenemos el compromiso de llegar a la prohibición de las terapias de conversión», declaró.