¡La naturaleza es diversa hijas! ¡Y se sabe!
¡Manas! Pues resulta que dos hembras de cóndor de California que se encontraban en cautiverio tuvieron una cría cada una sin la necesidad de aparearse con un macho. ¡Quedé! Todo parece indicars que es la primera vez que se documenta una reproducción de éste tipo en la especie, mejor conocida como partenogénesis.
Durante el análisis de muestras biológicas, se descubrió que las dos crías de cóndores se relacionaban genéticamente con las hembras, sin embargo no encontraron rastro alguno de ADN de ninguno de los machos en cautiverio, convirtiéndose en los primeros casos de reproducción asexual o partenogénesis.
Bueno manas, y seguramente, al igual que yo lo hice, se estarán preguntando que es eso de la partenogénesis, pues resulta que es una forma de reproducción basada en el desarrollo de células sexuales femeninas no fecundadas. Se da con cierta frecuencia en seres microscópicos, crustáceos, insectos, anfibios, reptiles y más raramente en algunos peces o aves, como en ésta ocasión.
«Es realmente un descubrimiento asombroso», dijo en un comunicado Oliver Ryder, director de Genética de Conservación en la San Diego Zoo Wildlife Alliance.