El pasado 31 de diciembre de 2021, la ministra de Justicia, Evelina Dobrovolska firmó la orden que permite el cambio de identidad.
¡Manas! No obstante este pequeño avance, aún falta mucho camino por recorrer, puesto que las personas trans que deseen cambiar su nombre en los documentos oficiales, seguirán teniendo que obtener un «certificado» de un centro sanitario lituano o de la UE que indica una «transexualidad diagnosticada». Lo cual sigue siendo una violación a los derechos de las personas trans.
La nueva normativa entra en vigor el próximo 02 de febrero y será «un paso importante que ayudará a Lituania a garantizar la aplicación parcial de la sentencia que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) dictó hace más de una década, así como la consolidación de las normas de derechos humanos», declaró el Ministerio de Justicia.
En 2007, un hombre trans de 28 años ganó su caso contra Lituania en el TEDH por no proporcionarle el Estado documentos legales en su género correcto. Los siete jueces dictaminaron que Lituania debía aplicar la nueva legislación sobre reasignación de género en un plazo de tres meses o pagar una indemnización por daños y perjuicios.
Durante el caso de 2007, el Tribunal observó que la legislación lituana había reconocido el derecho de las personas trans a cambiar no sólo su género sino también su estado civil. Sin embargo, había una laguna en la legislación pertinente: la ley que regula la cirugía de reasignación de género, aunque está redactada, aún no se ha adoptado.
Según la legislación de la UE, todos los Estados miembros deben «facilitar» a las y los ciudadanos LGBT+, lo que significa que deben estar libres de discriminación.
No obstante, la homosexualidad no se despenalizó en el país, de mayoría católica, hasta 1993, y la constitución sigue definiendo el matrimonio como entre un hombre y una mujer.
Gitanas Nausėda, presidente de Lituania, ha manifestado su creencia en lo que él llama valores familiares tradicionales. Se ha manifestado en contra de lo que califica de «propaganda sexista» y ha dicho que el matrimonio es entre un hombre y una mujer.
«Como presidente de la República de Lituania, utilizaré mis poderes para asegurarme de que así sea», dijo en un mitin en mayo de 2021, mientras los ciudadanos protestaban contra el proyecto de ley que permitiría las uniones civiles entre personas del mismo sexo.
