Mientras continúa la batalla pública sobre las separaciones familiares en la frontera sur de los EE.UU., los informes muestran que la administración de Trump está destinando el dinero de los programas de VIH / SIDA para financiar los centros de detención infantiles.
La Oficina de Reasentamiento de Refugiados está considerando la posibilidad de que se necesiten 25,450 camas más, para niños inmigrantes para fines de año. La oficina, parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos, aparentemente se sorprendió cuando el Fiscal General de los Estados Unidos, Jeff Sessions, anunció la nueva política de “cero tolerancia” que las familias serían separadas si fueran atrapadas cruzando la frontera sin autorización.
Según la política, los padres son encarcelados y los niños han sido colocados en jaulas que el Senador Jeff Merkley, que visitó una instalación, describió como “perreras”. Ahora, en preparación para una nueva oleada de separaciones familiares, el HHS no solo está solicitando fondos suplementarios, sino que también está planeando reasignar dinero del Programa de VIH / SIDA de Ryan White.
La Ley Ryan White CARE fue presentada en 1990 por el Senador Ted Kennedy, semanas después de la muerte de su homónimo adolescente de Ohio, quien había adquirido VIH a través de una transfusión de sangre para tratar su hemofilia. El proyecto de ley fue promulgado por el presidente George H.W. Arbusto.
Según el sitio web del programa, la ley Ryan White HIV / AIDS “brinda un sistema integral de atención que incluye atención médica primaria y servicios esenciales de apoyo para personas que viven con el VIH que no tienen seguro o tienen seguro insuficiente”.
El vicepresidente Mike Pence, se comprometió a reasignar fondos del programa con el fin de financiar la terapia de “cura gay” patrocinada por el estado.
