¿Creciste creyendo que el tocar tu propio cuerpo, particularmente tus genitales, es algo malo? ¿O que si te dabas placer a ti misme te podrían salir pelos en la mano, se te acabaría el semen y arderías en los infiernos? ¿O que las mujeres no se masturban, o peor aún, que “no deberían” hacerlo?
La mayoría de las personas crecimos en una sociedad que juzga y castiga al placer en todas sus manifestaciones, incluso cuando se trata del autoerotismo o la masturbación, pa’ les cuates. Por eso, en Sexcándala creemos importante hablar sobre los beneficios y efectos que tiene la masturbación.
Y, de paso, romper un poco los mitos y estigmas alrededor de una práctica que es, lejos de lo que se piensa, muy sana para cuerpo y mente.
Una de las dudas más comunes que surgen es si todas las personas se masturban. Y, lo cierto es que, aunque no se hable mucho de eso, la mayoría lo hacemos. Es muy común que las personas de cualquier género y edad lo hagan. Todos los cuerpos sienten y tienen derecho a sentir placer.
El autoerotismo es una forma de regalarnos eso, y de conocer y aprender a disfrutar y amar nuestro cuerpo y sus sensaciones. Y justo por eso, cada persona se masturba de forma diferente, con distinta frecuencia y por motivos diversos. Lo cierto es que la masturbación es salgo súper personal y no existe una forma “única” de hacerlo.
Lo importante es reconocer que, al masturbarse, las personas descubren mucho de sí mismas: qué les genera excitación, cuándo y de qué forma. Es una forma muy personal y accesible a todes para conocerse y descubrir su propio código erótico.
Además, resulta que esto de “darse amor”, tiene muchos otros beneficios, además de ser una práctica profundamente placentera. Sirve, por ejemplo, para liberar estrés y tener un mejor sistema inmunológico. De hecho, puede ayudar a prevenir algunas enfermedades como el cáncer, la diabetes, infecciones urinarias o, incluso, depresión.
Todo esto porque durante la masturbación se reduce la tensión, el estrés, mejora la respuesta de tu sistema inmunológico, y te relajas.
Regresando a esto de los mitos acerca de la masturbación, existe por ahí una idea de que masturbarse es como de adolescentes, y para gente que no tiene con quien echar pasión … lo que me lleva a preguntarles, ¿se vale masturbarse si ya no soy adolescente, soy señora y tengo pareja? ¿No estaría siendo infiel?
Es una duda súper común y vale la pena abordarla. No, la masturbación es una práctica muy personal que no tiene nada que ver con la vida sexual en pareja o con otras personas. En todo caso, es una práctica que puede enriquecer lo que vivimos con nuestras parejas, si les compartimos uno que otro “tip”.
Y es que muchas personas que están en una relación se masturban, y esto no quiere decir que su pareja no les satisfaga o que sean infieles. Simplemente se permiten usar este “as” bajo la manga, para darse un momento de placer, sin riesgos para su salud, y por supuesto, sin transgredir ningún espacio de la relación. Es algo de ti, para ti, contigo.
Se trata de una práctica que puede convertirse en una forma de complementar tu vida sexual con tu o tus parejas, pero tú decides cuándo y si te resulta cómodo, útil y disfrutable hacerlo.
Ahora ya lo sabes, la masturbación es una práctica que, además de personal, es placentera, saludable y que puede ayudarte a construir vínculos eróticos con otras personas. Explórala, vívela, pero, sobre todo, disfrútala. Y, si tienes dudas, no dejes de escribirnos en Sexcándala para seguir conversando, aprendiendo y haciendo una comunidad con salud sexual.
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