El Castillo de Chapultepec, el único en su tipo en América, localizado en el corazón de la CdMx, forma parte de la campaña comercial de la serie «House of the Dragon».
La serie streaming «House of the Dragon», de la plataforma HBO Max, estrena su segunda temporada. Y como parte de su campaña promocional, incorporó al Castillo de Chapultepec, en la Ciudad de México.
En dicha campaña, circuló un video en redes sociales en donde puede verse un video del Castillo de Chapultepec mostrando su lealtad a «Rhaenyra Targaryen», de la «Casa Negra».
El video promocional dice lo siguiente:
«Rhaenyra Targaryen de la Casa Negra se ha ganado la lealtad de México, tras revelar su bando en el Castillo de Chapultepec
»
Pero a los que no les emocionó mucho la campaña fue a las autoridades culturales mexicanas, específicamente del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
¡Que se enoja el INAH!
Las autoridades encargadas de la investigación, conservación, protección y difusión del patrimonio cultural de México tomaron este movimiento como una «falta de respeto» de la empresa de publicidad de la serie.
En un comunicado el INAH declaró:
«Se llevarán a cabo las medidas legales conducentes, dado que se trata del uso indebido de la imagen de un monumento histórico»
“Se informa que las imágenes son falsas, puesto que en ningún momento se han colocado banderas, pendones ni ningún otro material publicitario relativo a dicha producción sobre este inmueble, y tampoco se ha autorizado la reproducción de imágenes de este espacio para la promoción de la serie.»
«Lo que se aprecia en redes sociales fue generado a través de programas de edición de imagen o inteligencia artificial”.
No es la primera vez que Max incluye ciudades y puntos geográficos de importancia mundial en el mundo mágico de «House of the Dragon» o «Game of Thrones».
Monumentos como el Puente de Brooklyn y el edificio Empire State, en Estados Unidos, han sido utilizados en sus campañas.
Yo pienso que las autoridades culturales del país deberían relajarse un poco y aprovechar el buen empujón de propaganda turística para la capital mexicana.