El Gobierno de Hungría ha aprobado enmiendas en su constitución y ha autorizado una serie de acciones que violentan los derechos de la comunidad LGBT+.
El Gobierno de Hungría, al mando del primer ministro nacionalista Viktor Orban prometió en marzo una «gran limpieza de Pascua» al referirse a la comunidad LGBT+. Y parece que lo está cumpliendo.
Y es que este lunes 14 de abril, el Parlamento húngaro aprobó una enmienda a la Constitución que permitirá en adelante al Gobierno húngaro prohibir eventos públicos de las comunidades LGTB+. Esta enmienda fue autorizada por 140 votos a favor y 21 en contra.
Esta enmienda fue propuesta por la coalición gobernante Fidesz-KDNP, liderada por Orbán. Esta codifica la prohibición de los eventos públicos y declara que los derechos de los niños al desarrollo moral, físico y espiritual prevalecen sobre cualquier otro derecho fundamental que no sea el derecho a la vida, incluido el de reunión pacífica.
La nueva enmienda también permite que se suspenda la ciudadanía de los húngaros que tengan doble nacionalidad en un país no perteneciente a la Unión Europea. Esto si se considera que representan una amenaza para el orden público, la seguridad pública o la seguridad nacional. La enmienda es la decimoquinta a la Constitución húngara desde que el partido de Orbán redactó y aprobó unilateralmente el documento en 2011.
También se ha aprobado el uso de tecnología de reconocimiento facial para identificar a quienes participan en actos públicos LGBT+. Esto con el objetivo de castigar a todo aquel que tome parte en la «representación o promoción de la homosexualidad», con multas de hasta 200.000 florines húngaros (550 euros).
La postura hostil del gobierno húngaro contra la diversidad sexual.
La postura hostil del gobierno húngaro contra la comunidad LGBT+ no es nada nueva. Desde 2019, la ley húngara ya restringía el matrimonio entre parejas del mismo sexi. Así mismo, desde diciembre de 2020, prohíbe a las parejas del mismo sexo adoptar niños. Desde 2021, está prohibido hablar a los menores sobre «homosexualidad y reasignación de sexo».
Desde abril de 2023, también existe una ley que permite a cualquier ciudadano denunciar de manera anónima a las parejas LGBT+ con hijos a su cargo.
En los colegios húngaros se prohíbe que se propague cualquier contenido o alusión a las comunidad LGBT+, bajo el argumento de que corresponde a las familias la decisión sobre la educación sexual de sus hijos.