El diputado local por el distrito 19 de Puebla Capital, Héctor Alonso Granados, expuso su postura discriminatoria ante la adopción en parejas de la comunidad LGBT+ durante la sesión ordinaria del estado el día de ayer, martes 23 de febrero.
“(…) El defender a las familias heterosexuales contra los atropellos y excesos de minorías, no quiere decir que no se reconozcan los derechos de las minorías, ¡claro que los tienen! Claro que cada persona tiene el derecho a definir su sexualidad a la edad que ellos… que ellos, que tengan la mayoría de edad, pero nadie tiene la infame oportunidad de designarle a un niño a los nueve años, la sexualidad que va a tener. Eso no, la adopción de niños es el derecho del niño a tener una familia, no el derecho a los homosexuales a tener niños.
“No se confundan, defenderemos a la familia y su integridad de la familia por sobre todas las cosas, defenderemos los derechos de las minorías, de las lesbianas, de los homosexuales, intersexuales… a vivir en paz y armonía y a que se les respeten sus preferencias, pero de eso a que quieran tener supremacía sobre la mayoría, de ninguna manera (…)
“No se metan con los niños, no se metan con la familia mexicana que es la mayoría la familia heterosexual, porque la base de la sociedad es la familia y ahí se pueden dar casos de personas con preferencias sexuales diferentes, bendito sea Dios, ¡qué bueno que así sea! Y lucharemos porque los respeten y los traten con dignidad (…) pero tampoco podemos llegar a extremos, en donde quieran un baño de hombre, uno de mujeres, uno de lesbianas y otro de etcétera, etcétera y otro… ¿cuántos baños tendríamos que hacer? Que en un baño público esté mi hija y llegue una persona que es hombre disfrazado de mujer, yo no estoy de acuerdo, si ustedes están de acuerdo, bueno (…)”, expresó Granados durante la sesión.
Aquí puedes escuchar parte de su participación:
Qué hay detrás del discurso
En opinión de Ángel Candia, consultor privado para empresas en materia de salud sexual, diversidad e inclusión, el diputado muestra una clara ignorancia con respecto a qué es la orientación sexual, cómo se define y cómo se construye. Hablar de que las personas tenemos “el derecho a definir (nuestra) sexualidad a la mayoría de edad” demuestra un profundo desconocimiento de qué es la sexualidad y sus respectivas dimensiones. La sexualidad no se impone ni se designa, como dice el diputado, sino que se vive, experimenta, construye y fluye a lo largo de la vida de las personas.
Además, Candia enfatiza que ni las parejas heterosexuales, ni las homoparentales, tienen la capacidad de influir en la orientación sexual, ni la identidad de sus hijas o hijos. Esa es una afirmación que no se sostiene en evidencia alguna y, por el contrario, está cargada de ignorancia y odio a quienes vivimos distinto a lo que el diputado llama “la familia mexicana”.
Ángel, quien también es conductor de Sexcándala, expone que la frase “no se metan con los niños” es quizás una de las frases con mayor odio y desdén a la comunidad LGBT+, porque lleva implícita la premisa de que somos personas que, por el mero hecho de ser y existir, ponemos en riesgo la integridad misma de las y los niños. Y no, señor Diputado, somos tan personas, con sus respectivas virtudes y defectos, como cualquier otra.
Finalmente puntualiza que, “cuando en un discurso tienes que aclarar que no estás siendo homofóbico, me parece, las palabras hablan por sí solas”.
Por su parte, Francisco Robledo, Socio-Director en ADIL diversidad e inclusión laboral, recuerda que en México, de acuerdo con el Instituto de Investigaciones Sociales (ISS) de la UNAM, existen -al menos- once tipos de familias diferentes, donde menos del cincuenta por ciento de estas familias están conformadas por una figura femenina, una masculina y descendencia directa de ambas personas.
Y resalta que todas las demás configuraciones son dignas de respeto, acceso a derechos y a que una persona como este diputado esté trabajando por el bienestar de todas las familias, no nada más por una fracción de éstas.
Finalmente, Robledo explica que, apenas el uno por ciento de las familias, de acuerdo con este estudio, están registradas como familias homoparentales y que sólo se han alcanzado cerca de 20,000 matrimonios del mismo sexo en todo el país. Y aclara que es justo esto lo que se tiene que observar, el acceso a derechos de las minorías, que es por lo que personas como éstas deberían estar trabajando, por todas y por todos y no nada más estar contradiciendo su discurso, que no es odio, pero opina lo contrario. Desde que existe un pero es que justo está poniendo sus creencias y su LGBTfobia antes que el bienestar de las personas.
Cabe señalar que los comentarios y expresiones del diputado retrasaron la discusión de la Ley Agnes en el Congreso local. El dictamen también se retrasó debido a los posicionamientos del diputado, José Juan Espinosa Torres, durante sus intervenciones en esta sesión.
Por su parte, la diputada Estefanía Rodríguez Sandoval, adelantó que por las declaraciones “homofóbicas, transfobias y xenófobas” del diputado Alonso Granados, presentará una queja ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
La discusión sobre la Ley Agnes se enlistó en el punto 16 de la orden del día, la cual se cubrió en esta ocasión hasta el punto ocho por la demora que provocaron estos señalamientos. Ello a pesar de la exigencia de grupos feministas y de la comunidad LGBTTI para aprobar esta ley.
Antecedentes misóginos
En junio del año pasado, Héctor Alonso Granados fue expulsado de la bancada del Movimiento Ciudadano (MC) en el Congreso de Puebla por la confrontación que sostuvo con la diputada del Partido Encuentro Social (PES) Nora Yéssica Merino Escamilla, en la que la mandó a callar y la tachó de “niñita”.
Acción por la cual, el Instituto Electoral del Estado (IEE) amenazó al diputado con retirarle el cargo de elección popular que ocupa desde septiembre de 2018 de incurrir nuevamente en manifestaciones que violenten a cualquier diputada del Congreso de Puebla.
Esa no fue la primera vez que Héctor Alonso pierde un espacio dentro de un grupo parlamentario, pues en el 2019 Morena lo sancionó con la expulsión de su bancada al concluir que incurrió en expresiones misóginas durante una entrevista en la que sugirió a las mujeres que impulsan la despenalización del aborto “pensar antes de abrir las piernas”.
