La artista que tuvo el valor de enfrentarse a la institución con más poder sobre las mentes de las personas que vivían en los 80’s y en atreverse a defender a todas las minorías vulnerables, ella es Madonna
Durante finales de los 80’s se estrenaba el cuarto álbum de estudio por parte de la cantante estadounidense Madonna, quien recientemente se divorciaba de Sean Penn y su matrimonio fue tema de especulaciones sobre posible maltrato que más tarde la reina del pop desmentiría.
Sin embargo, pese a que muchos pensaran que se encontrarían con una Madonna débil por una ruptura amorosa, la realidad fue diferente, pues su siguiente trabajo discográfico «Like a Prayer» se convirtió en una carta de protesta hacia la iglesia católica.
Los problemas que derivaron de este proyecto musical de Madonna fueron desde la cancelación de un comercial que grabó con «Pepsi» en donde se incluía el tema homónimo de su álbum hasta la condena por parte del Papa Juan Pablo II, quien arremetió directamente contra la reina del pop.
En el video oficial del tema principal de su álbum «Like a Prayer», Madonna se atrevió a abordar una problemática social que desgraciadamente se repitió hace casi dos años con el asesinato de George Floyd, la discriminación racial y el abuso policiaco.
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Pero esto no fue suficiente polémica para la reina del pop, pues Madonna decidió abordar otros temas en la lírica de las canciones que compone el álbum. Un ejemplo es que con «Express Yourself» habla sobre el empoderamiento femenino así como el de la diversidad sexual.
De igual forma letras como «Love Song» o «Till Death Do Us Part» tienen referencias sobre su escandaloso romance con Sean Penn y el amor que le tiene pese a ya no ser esposos. Aunque en «Oh Father» escuchamos un reclamo de Madonna hacia su padre, mientras que en «Dear Jessie» apreciamos el tan corto amor que disfrutó Madonna de su madre.
Y por si fuera poco, hay otro tema que desde ese momento la reina del pop fue pionera en el mundo artístico en abordar públicamente en sus canciones, el VIH/SIDA.
El dolor de Madonna por buscar desesperadamente una cura mientras veía a sus amigos morir en pleno pico de la pandemia por el VIH/SIDA se refleja en «Pray For Spanish Eyes», una plegaria de la cantante hacia Dios por pedirle que acabe con este virus que cobró millones de vidas.
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Por estos motivos y más, Madonna se volvió en la pesadilla en carne propia para la iglesia católica, una institución que condenaba el uso de preservativo mientras ella defendía la libertad sexual responsable y con conocimiento.
Aunque la cantante adelantada a su época perdió público por este proyecto musical, se mereció 15 millones de ventas a nivel mundial y hasta la fecha no existe álbum musical que se compare al nivel de miedo que provocó Madonna sobre la iglesia.
