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Terrible ataque contra mujeres lesbianas en Argentina ya cobró la vida de tres víctimas

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Rabia e indignación mundial ha causado el terrible ataque que tres mujeres lesbianas sufrieron en Argentina el pasado 5 de mayo y que ya cobró la vida de dos víctimas.

La terrible agresión se llevó a cabo en un hotel en Barracas, Argentina. En el día señalado líneas arriba, a las 23:30 p.m., Pamela Cobbas, su pareja Mercedes Roxana Figueroa, Sofía Castro Riglos y Andrea Amarante, fueron atacadas por su vecino Justo Fernando Barrientos, quién abrió la puerta de la habitación de las mujeres y les arrojó un explosivo casero que provocó un incendio.

Los vecinos acudieron en su ayuda pero, según testimonio de algunos, el hombre golpeó a las que lograron salir de la habitación y las arrojó de nuevo al fuego.

Pamela Cobbas falleció apenas unas horas después del ataque; Mercedes Roxana Figueroa falleció el miércoles 08 de mayo; Andrea Amarante tuvo el mismo destino el día 12 de mayo. De las cuatro solo Sofía ha logrado sobrevivir. Su pronóstico es favorable.

De acuerdo al testimonio de vecinos de las víctimas, su agresor ya las había amenazado desde meses antes. Simplemente no le agradaban por ser lesbianas.

“Discutían bastante. Ellas llamaron a la policía una vez y entiendo que lo habían denunciado. Él les decía ‘engendros’ por su condición sexual”.

El agresor se encuentra preso, acusado de homicidio y lesiones graves. Aparentemente después del ataque, el criminal fue encontrado oculto en un baño del hotel; portaba una sierra con la que trató de autolesionarse.

El ataque, claramente un crimen de odio, ha despertado la indignación internacional. Diversos colectivos y organizaciones Argentinas se han manifestado públicamente exigiendo justicia y transparencia ante los hechos. Uno de ellos es el colectivo Autoconvocades Lesbianes por Barracas, quiénes han declarado:

“El ataque nos produce profundo dolor y enojo: no fue un hecho cualquiera. Fue un acto de odio hacia las lesbianas. El crimen ocurrió en un contexto de extrema precariedad de la vida, donde las cuatro vivían hacinadas en una habitación, y donde diariamente las identidades LGTBQI+ somos foco del aumento de la violencia”.

Vecinos de las víctimas han dado declaraciones contundentes que ponen en evidencia el panorama lesbofóbico que, tristemente aún impera en el mundo:

“Acá hay mucha gente que piensa como él (Barrientos)”. “Ya había tenido problemas antes con un hombre gay que vivía en el hotel. Hizo que se fuera. Le arrojaba una zapatilla a su puerta, le gritaba ‘puto’”.
“Fuimos varios que intentamos ayudarlas. Pero hubo personas que no se acercaron a ayudar”

Hasta el momento, nadie ha reclamado los cuerpos de las tres fallecidas. Ni amigxs o familia. La sobreviviente tampoco ha recibido visita alguna.

Muchxs colectivos afirman que estos ataques de odio se han intensificado en Argentina en los últimos meses dada la postura del nuevo gobierno de Javier Milei, quién ha realizado desafortunadas declaraciones contra lo que el denominó como un «lobby gay».

A su vez, otros activismos señalan la poca cobertura que medios argentinos dieron al desafortunado suceso.

Este lamentable crimen es una prueba más de que el camino para la dignificación, el respeto y la justicia para la comunidad LGBT+ aún encuentra muchísimos obstáculos que vencer, en Argentina y en todo el mundo.