En un vuelo internacional de la aerolínea que cubría la ruta de Glasgow, Escocia, a Lisboa, Portugal, un pasajero británico fue detenido por intentar besar a otro hombre a la fuerza, generando un incidente que requirió la intervención de la tripulación.

Durante el trayecto, un pasajero notoriamente ebrio se volvió agresivo, mostrando un comportamiento inapropiado al insultar a los auxiliares de vuelo y amenazar con violencia mientras intentaban controlarlo. 

Según un video del incidente, el hombre, visiblemente intoxicado, exigía atención y llegó al extremo de intentar besar a otro pasajero.

El pasajero, descrito como «muy intoxicado», perturbó a quienes lo rodeaban al comportarse de manera grosera y exigir saludos. 

Su conducta alcanzó un punto crítico cuando trató de besar a la fuerza a un hombre sentado detrás de él, después de que éste ignorara sus demandas de estrechar la mano. 

La situación se tornó violenta cuando el pasajero rechazado comenzó a lanzar golpes y a gritar, llevando a los auxiliares de vuelo a intervenir.

La tripulación de cabina se vio obligada a contener al pasajero ebrio durante 35 minutos antes del aterrizaje, asegurando la seguridad de los demás pasajeros. 

Una vez en tierra, la policía portuguesa subió a bordo para detener al individuo y tomar las medidas necesarias.

Postura de la aerolínea ante el incidente

EasyJet, la segunda mayor aerolínea de bajo coste de Europa, emitió un comunicado expresando su compromiso con la seguridad de los pasajeros y la tripulación. 

La compañía subrayó que situaciones como estas son poco frecuentes, pero son abordadas con seriedad, rechazando categóricamente cualquier comportamiento abusivo o amenazante hacia la tripulación o los pasajeros.

«La seguridad y el bienestar de nuestros clientes y tripulación es nuestra máxima prioridad», afirmó la aerolínea.