“Va de nuez” es un conjunto de 4 historias sencillas e hilarantes contadas desde la perspectiva de la comunidad judeo mexicana, y cómo el sincretismo cultural se contrapone con aspectos de identidad importados de las tierras de origen. 

 Hassel Sara 

@hassel_sara3 

La dramaturgia es de José Appo (La azotea y La fuga), Hugo Yoffe (La prueba) y Jacobo Levy (Ojo por ojo), autores judíos que rompen con lo purista que puede haber en el estigma de las creencias. 

“Va de nuez” Es una obra que busca reírse de uno mismo desde el respeto y el mero entretenimiento, que de manera orgánica logra que te puedas identificar con situaciones que vivimos día con día, o incluso remontar a una persona de nuestro entorno y que terminamos viendo de manera amena en el escenario. Es gracioso porque incluso la construcción y dinámica de los personajes nacieron a partir de la cotidianidad.

“Yo me basé en mí familia, siento que fue un ejercicio divertido. Es abordar las costumbres con una plática de disfrute y diversión…”  apuntó Astrid Mariel Romo con una gran sonrisa.

“Encontrar el ritmo fue todo un reto por el lenguaje coloquial, da cotidianidad al texto. La  clave estaba en escucharnos, de ahí encontramos confianza y nos divertimos mucho más…” menciona Carlos Ordóñez.

“Va de nuez” goza de una gran particularidad, pues el teatro breve nos permite vivir una experiencia emocionalmente intensa e interesante que en cada transición de texto nos mantiene expectantes de un nuevo disparate escénico. 

Cada una de las historias resulta tan diferente de la otra empezando por “La azotea” que nos pone en el chismecito de 2 trabajadoras del hogar, que con extrañeza platican de las costumbres de sus empleadores y que defenderán su legítima profesión judía a capa y espada.

“La prueba” es un maravilloso texto que da vida a una dupla bidimensional, con personajes más “realistas” en una dinámica complicada de pareja que evita las responsabilidades, y aún así disputan el poder sobre el otro. 

“Ojo por ojo” te pondrá los nervios de punta, ya que el tono fársico e intenso hará que la sátira de la superstición sea una risa al límite. Además es gratificante tener a los 4 talentos en simultáneo. 

“La fuga” resulta ser la más irónica, pues la humedad ha formado la imágen de la virgen de Guadalupe ¿Coincidencia, milagro… o negocio? Veremos cómo se resuelve este dilema desde el absurdo.

Todas las historias de “Va de nuez” están dirigidas por Daniela Parra, quien se encargó de llevar al elenco a explotar su enorme talento multifacético, pues si algo distingue a esta obra, es la curva histriónica de los intérpretes de acuerdo al tono que cada texto exige. 

Es de destacar la gestualidad y la modulación vocal de Astrid Mariel Romo que brinda ese gran toque cómico y habla por sí mismo. Carlos Ordóñez tiene una calidad de interpretación tan variopinta; que verle desde comadre a próximo padre de familia resulta un deleite en el que no puedes creer que venga del mismo intérprete. 

Ana Isabel Esqueira impone presencia en su lenguaje teatral, cuando toma control de la palabra brilla en una gran interpretación cuyos personajes son de carácter más polarizado, ¿Ya mencionamos que canta bien bonito? 

Hamlet Ramírez deja todo en escena, es fuerza y energía en todo el sentido de la palabra, una construcción de la escena impecable y denotable en cada línea. 

“Va de nuez” es un espectáculo despreocupado, jocoso y de un ritmo dinámico que vale la pena apreciar. Es un respiro de la vida real que hace bien al corazón. Es reirnos un poco de todos los contrastes de la cotidianidad.

La obra “Va de nuez”, se presenta todos los jueves, hasta el 25 de abril en el Teatro Varsovia a las 20:30 p.m.

Entrada general $300