Hoy en día el estigma alrededor de las personas que viven con VIH sigue estando latente. Desafortunadamente, está presente en medios de comunicación, en discursos y hasta en empresas, como Volaris, que ha dejado ver en más de una ocasión que no tiene ni la información, ni la capacidad y, mucho menos, la sensibilidad en torno al tema.
Situación que ha llevado a la empresa a cometer actos de discriminación, como lo hizo con Armando, un joven que vive con VIH, quien participó en el año 2017 en un proceso de selección para postularse en una vacante de sobrecargo de aviación.
Armando platicó con nosotros y nos contó que en junio de 2017 tenía su licencia y cumplía con todos los requisitos solicitados por Volaris y al enterarse de la vacante decidió participar en el proceso de selección, en el cual se le informó que tenía que pasar algunos filtros consecutivos.
Todo pintaba bien, pues había logrado pasar los primeros dos filtros y le habían notificado que en esa semana firmaría contrato. Sin embargo, el 12 de junio recibió un correo donde le informaron que tenía que hacerse estudios médicos que constaban de hoja de antecedentes familiares, pruebas de sangre y audiometría. Lo que Volaris y Laboratorios Polanco, los cuales forman parte de Médica Sur, no notificaron jamás fue que realizaban pruebas de detección de VIH y ETS, pues los llevan a cabo sin el consentimiento de las personas.
Armando acudió a la empresa a hacerse los estudios requeridos, luego de unos días recibió otro correo en el que le notificaron que no era apto para desempeñar el puesto.
La respuesta resultó bastante extraña, “algo me zumbaba” cuenta Armando, pues todo había marchado bien e inclusive ya se había mencionado la firma de contrato por lo que solicitó una aclaración del porqué del rechazo, pero no recibió respuesta alguna.
Armando entró en depresión, pero afortunadamente contó con el apoyo de Tu voz es mi voz, movimiento que tiene como objetivo acercar a las personas a una justicia igualitaria, creando estrategias legales por la defensa de los derechos humanos.
Ahí conoció a Jessica Gonzáles Hermosillo, licenciada en derecho, quien le explicó que no existe una justificación médica, ni legal para que apliquen pruebas de VIH como requisito de contratación y que, además, Laboratorios Polanco violó sus derechos al hacerle pruebas sin su consentimiento y compartir los resultados con un tercero.
Tu voz es mi voz ha acompañado a Armando durante el procedimiento de una demanda por daño moral por acto de discriminación en contra de Volaris y Médica Sur, pues ambas empresas actuaron fuera de la ley.
Armando no es la primera persona que vive una situación similar, es por ello que llama a los jóvenes que han pasado por algún hecho similar a que sepan que “no están solos, está la COPRED en la Ciudad de México y la CONAPRED a nivel nacional” y, agregó que, “no es posible que nos nieguen la oportunidad de desarrollarnos en la carrera que estudiamos, no podemos seguir así”.
Por su parte, la Licenciada Gonzáles Hermosillo mencionó que el caso de Armando es apenas el tercero registrado por daño moral, pues sólo hay dos precedentes similares antes de él.
Además, expuso que el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México emitió un auto a las empresas Controladora Vuela Compañía de Aviación S.A.B. de C.V. y Médica Sur S.A.B de C.V, para que notifiquen a futuros inversionistas en la Bolsa Mexicana de Valores, Bolsa Institucional de Valores y a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que tienen una demanda por daño moral por acto de discriminación. Sin embargo, las compañías no han llevado a cabo esta acción.
Hoy, nos unimos a Armando y a Tu voz es mi voz para exigir a Volaris y a Médica Sur que se apeguen a las peticiones legales que les han sido impuestas.
No podemos permitir que acciones como éstas sigan promoviendo un estigma que es aún más dañino que el propio virus.