Hijas, de todas las adicciones, quizá la sexual pareciera la menos dañina y más placentera. Pero, manas, la intensa necesidad de sexo puede llegar a afectar la vida diaria de quien la padece.
Imagínense, las personas que tienen esta adicción son incapaces de controlar su comportamiento sexual. Lo que puede llegar a provocar autoestimulación o masturbación compulsiva, diversas parejas sexuales, exhibicionismo o hasta acoso sexual.
Y buenaaaa… pese a que los expertos, aún no han encontrado una causa concreta por la cual algunas personas se vuelven adictas al sexo, se tiene la teoría de que la adicción al sexo puede estar relacionada con una anormalidad bioquímica en el cerebro, similar al mecanismo de supervivencia y recompensa respecto a la comida o las drogas. Esta activación del sistema de recompensa puede llegar a producir una retribución tan fuerte que podría hacernos descuidar nuestras actividades en la vida cotidiana.
Pero manas, no se me asusten. Que hay una diferencia entre que te encante el sexo y lo practiques seguido, a tener una adicción. Vicente Alcántara Aceituno, miembro de Saluspot y psicólogo general sanitario, publicó para nuestras comadres de Muy Interesante, una lista en la explica los principales síntomas, ¡chéquenla!
Principales síntomas de la adicción al sexo
- Existe un patrón problemático que provoca un deterioro o malestar significativo.
- Hay una frecuencia alta y muy prolongada en el tiempo, es decir, que ocupe mucho tiempo en su vida diaria.
- La inversión de mucho tiempo en la búsqueda de sexo y su práctica.
- Cuando el tiempo dedicado al sexo te lleva a incumplir los deberes fundamentales en trabajo, escuela u hogar, así como el abandono de actividades sociales, profesionales o de ocio.
- Cuando tus prácticas sexuales te ocasionan problemas sociales o interpersonales persistentes y recurrentes.
- Baja autoestima por continuar teniendo sexo a pesar de tener conocimientos de que existe un problema psicológico.
- Necesidad imperiosa de tener sexo para conseguir el mismo efecto deseado que provocaba inicialmente.
- Experimentar síndrome de abstinencia provocado por no practicar sexo.
En fin, hijas, una de las técnicas más empleadas en el tratamiento de la adicción al sexo es la terapia cognitivo-conductual, ya que ha sido muy exitosa en enseñarle al paciente a gestionar y controlar la compulsión hacia el sexo, además de brindarle herramientas para mejorar su calidad de vida y sus relaciones interpersonales.