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Señalamientos a atleta argelina sacan a la luz posturas transfóbicas en los Juegos Olímpicos de París 2024.

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La boxeadora argelina Imane Khelif enciende polémica en redes. Algunxs afirman erróneamente que es una mujer trans.

la boxeadora argelina Imane Khelif, venció en tan solo 46 segundos a la italiana Angela Carini, quien se retiró de la pelea. Esto sucedió en las competencias de box femenil de los Juegos Olímpicos de París 2024.

Este hecho encendió la discusión sobre la elegibilidad de género de Khelif, quien se ha visto atacada en redes sociales. La boxeadora ha sido referida por algunxs como una mujer trans. Ante esta desinformación, el Comité Olímpico Argelino ha salido, una vez más, a defender a su atleta olímpica.

Y digo una vez más mis cielas porque no es la primera vez que se especula que Imane es una mujer trans.

Esto ha generado que, además de que se ponen en duda sus victorias, es objeto de discriminación, burlas, acoso y malgenerización.

Las imágenes de su rival en el ring, Angela Carini, perdiendo, quejándose e incluso gritando «No es justo», fueron tomadas de forma incorrecta en redes sociales. Gente entrometida aseguraba que Angela se quejaba de su oponente. Pero en realidad la boxeadora italiana lloraba por desilusionar a su padre.

Un tema ya rebuscado

Volviendo a Khelif, la argelina fue descalificada del campeonato mundial de 2023 después de fallar una prueba de elegibilidad de género no especificada. Nunca se hicieron públicos los resultados, pero la decisión fue tomada por la IBA (Asociación Internacional de Boxeo). Pero este organismo, tras una serie de escándalos, fue prohibido por el Comité Olímpico Internacional (COI) para organizar el torneo de boxeo en estos Juegos Olímpicos. Esto le permitió a Khelif ser habilitada.

Khelif ya participó en Tokyo 2020 sin este escrutinio de las redes sociales. Pero ahora se dieron vuelo los «opinólogos».

Argelia es un país que ha criminalizado a la comunidad LGBT, por lo que no tienen reconocimiento legal. Esto haría imposible que Khelif hubiera llegado a París con un cambio de género en su documentación oficial.

Lo grave de este asunto es que, una vez más, se difunden estereotipos erróneos sobre las mujeres trans y se fomenta el odio, que ya ven que casi no se da en las redes.