Así es manas
No es que el matrimonio como tal baje la tasa de suicidios. ¡No! Lo que pasa es que las personas LGBT se sienten más reconocidas, más seguras y más aceptadas y saber que su país les reconoce la posibilidad de unirse en matrimonio hace que se sientan más seguras y empoderadas y por ello sientan menos estress y se sientan más a gusto con ser LGBT, a diferencia de otros sitios en donde no se receonoce ese derecho y están sometidos a estress por el rechazo de la sociedad fomentada por el estado al no reconocer a su persona humana.
Al menos eso es lo que señalan estudios realizados en Suecia y Dinamarca, en donde el matrimonio entre personas del mismo sexo, ha reducido el número de lesbianas y gays que mueren por suicidio a casi la mitad.
El estudio conjunto del Instituto Danés de Investigación para la Prevención del Suicidio y los investigadores de la Universidad de Estocolmo utilizaron datos de registros de población nacionales en Dinamarca y Suecia.
Comparando dos períodos de 13 años, 1989 a 2002 y 2003 a 2016, observaron las muertes por suicidio de personas en parejas del mismo sexo durante el tiempo en que ambos países legalizaron las asociaciones civiles y el momento en que legalizaron el matrimonio entre personas del mismo sexo. Durante esos eventos los suicidios entre las parejas del mismo sexo cayeron un 46% entre los 2 períodos.
Los investigadores creen que la reducción del estigma influenciado por el matrimonio entre personas del mismo sexo contribuyó a la gran caída de muertes por suicidio.
«Estar casado protege contra el suicidio. Legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo y otras medidas legislativas de apoyo: en realidad, podrían reducir el estigma en torno a las minorías sexuales» señaló Annette Erlangsen, del Instituto Danés de Investigación para la Prevención del Suicidio.
El estudio afirma: “Con el paso del tiempo, la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo y la expansión de los derechos y protecciones a las parejas del mismo sexo, esas minorías se han vuelto mucho más aceptadas en los países nórdicos y en otros lugares».
«Esto podría haber disminuido la estigmatización, el estrés psicológico y el nivel de angustia experimentado por las personas de minorías sexuales, reduciendo así su riesgo de suicidio».