Manas, figúrense que PODER y Salud con Lupa analizaron las contrataciones para medicamentos antirretrovirales (ARV) de seis países de América Latina en plena pandemia de la covid-19.
Uno de los principales datos del informe es que hay 9,978 compras en total, por un monto aproximado de 312 millones de dólares.
La situación de pandemia que vivimos actualmente está empeorando la situación de latinoamericanos que viven con VIH. Ya que, tan sólo 1.3 millones de las 2.1 millones de personas que fueron diagnosticadas como seropositivas, tienen acceso a tratamiento. Es decir, que el 38 por ciento de personas diagnosticadas no tienen acceso al tratamiento.
Las cuatro conclusiones regionales de la investigación son:
Las políticas públicas en materia de salud implementadas en Bolivia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, México y Perú durante la emergencia sanitaria mundial están obstruyendo el acceso al tratamiento antirretroviral (ARV), vulnerando así los acuerdos internacionales que han firmado para combatir al Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y a las propias constituciones en las que se reconoce el derecho a la salud y a la vida de todas las personas.
La inmunosupresión por VIH no debería ser un factor de riesgo añadido a los pacientes con covid-19. Pero para que esto ocurra, la persona seropositiva debería de encontrarse en estado de indetectabilidad y ser intransmisible, es decir, que su carga viral sea tan baja que resulte imposible detectarla con una prueba rápida. No obstante, estos factores sólo ocurren cuando la adhesión y acceso al medicamento ARV ha sido constante, asunto que frente a la pandemia ha sido imposible de sostener para los sistemas de salud.
Con el combate a la covid-19 los gobiernos han cambiado de prioridades. Las unidades de virología han dejado de atender a pacientes seropositivos para centrarse en la covid, los paquetes de ARV ahora llegan con menos medicamentos, lo que provoca que se tenga que visitar con más frecuencia el centro médico, y en muchos casos se reporta desabasto. Las consecuencias en todos los países son las mismas: incremento del mercado negro y de las redes de autoayuda.
En un momento en el que el mundo vive pendiente del crecimiento de las cifras de un virus no mortal, es importante recordar que el VIH también es una pandemia, que es tratable y que sigue siendo uno de los principales problemas de salud pública en la región.
Uno de los datos más relevantes sobre México, es que es el país que compra más caro, 74 por ciento por encima de los precios de referencia. Además, al menos nueve personas que viven con el Virus de Inmunodeficiencia Humana, llevan cinco meses sin estudios de carga viral y con carencia de medicamentos.
El problema es sistémico: “Uno de los principales problemas para el análisis del sistema de contrataciones públicas de medicamentos en México es la descentralización indiscriminada del sistema farmacéutico que abastece a la nación, esto ha generado complicidad entre las instituciones del Estado y la industria farmacéutica”, explican activistas en el informe.
Conoce más sobre la investigación
PODER es una organización de la sociedad civil de transparencia, rendición de cuentas empresarial y derechos humanos.
Salud con Lupa es una plataforma digital dedicada a la salud pública en América Latina.
Puedes ver la investigación completa aquí.