Ricardo Anaya, Secretario General del Partido Acción Nacional, ha sido señalado como homosexual a su paso por la Cámara de Diputados.
Como era de esperarse, este panista de doble moral tiene una “familia ejemplar”, esposa e hijos de portada de revista, pero después de largas jornadas de trabajo, ex colaboradores suyos aseguran, que Anaya buscaba “desestresarse».
“Una vez me llamó a su oficina para pedirme un paquete de copias de unos documentos; ahí, de la nada, me preguntó si yo estaba a gusto porque si no, podría ‘ser de otra manera’”, relata Manuel, prestador de servicio social en San Lázaro.
Después de esa “invitación”, cuenta el ofendido, el entonces diputado pasó el brazo por encima del hombro del joven y se acercó por detrás, para indicarle al oído de cuáles documentos se harían las fotocopias.
“Lo sentí muy acelerado en su respiración, como nervioso, y su aliento era demasiado cálido sobre mi nunca; fue entonces que me incomodé y di dos pasos adelante y lo miré molesto. Me dijo que si yo estaba bien y como no respondí (por miedo) entonces cortó la conversación y me pidió que me retirara”.
Manuel asegura que esa fue la primera vez, pero que después hubo otras ocasiones más incómodas; relatos que pronto revelaremos aquí para denunciar la doble moral de estos panistas, que además, pretenden engañarnos con su “integridad” en estos tiempos electorales. ¡Qué escándala y qué obvia resultó ser Ricardo Anaya!
