El Consejo Nacional de Justicia brasileño aprobó una resolución que obliga a los jueces a consultar a las personas que se declaran transexuales o trasvestis sobre el tipo de presidio en el que prefieren permanecer presos.
De esta forma, las personas que forman parte de estos colectivos obtuvieron el derecho a decidir si quieren permanecer en presidios masculinos o si prefieren ser recluidos en cárceles femeninas.
Acorde con la resolución en Brasil, estos presos también tienen derecho a decidir si, dentro de los presidios masculinos o femeninos, quieren convivir con los reclusos en general o permanecer en los pabellones destinados al colectivo LGBT+.
En cuanto a los presos que se declaran homosexuales y lesbianas sí tienen que ser recluidos en presidios masculinos y femeninos, respectivamente. Sin embargo, podrán declarar su preferencia por un pabellón o una celda específica para las personas con su opción sexual.
El Consejo de Justicia aclaró que la decisión siempre será del juez responsable de la condena o del juez de ejecuciones penales y que los magistrados deberán tener en cuenta lo que declaren los presos sobre su identidad de género y orientación sexual.
Esta medida tiene como fin garantizar los derechos de personas sometidas a situaciones humillantes. Pues, según datos analizados por la CNJ brasileña, el país lidera la clasificación mundial de violencia contra la comunidad trans, cuya expectativa de vida no supera los 35 años.
Además, según datos del Departamento Penitenciario Nacional, en Brasil sólo el 3 % del total de presidios y cárceles del país cuentan con pabellones destinados a presos del colectivo LGBT+.