¡Qué mieda! El propietario de un sitio web de recuerdos de crímenes reales busca sacar provecho del renovado interés en Jeffrey Dahmer gracias a la reciente serie limitada de Netflix sobre el asesino en serie.
El propietario de Cult Collectibles, Taylor James, dice que está dispuesto a vender un par de anteojos que, según afirma, usó Dahmer en prisión por $150,000 dólares (3 millones de pesos aproximadamente).
Los anteojos distintivos no figuran en el sitio web de James, que presenta una colección de artículos que dice que obtuvo de una ex ama de llaves que trabajaba para el padre de Dahmer.
La «Colección Jeffrey Dahmer» del sitio incluye cubiertos, una biblia, fotos familiares y documentos de la prisión, todo lo cual James acordó vender por una parte de las ganancias, según TMZ.
Según su sitio web, James fundó Cult Collectibles, que dirige desde Vancouver, Canadá, con el fin de «archivar medios históricos de crímenes reales, obtener artículos para museos, investigación y consultoría para documentales», así como vender «merchandising original».
Entre 1978 y 1991, Dahmer asesinó y desmembró a 17 personas, la mayoría de las cuales eran hombres de color.
Los espantosos asesinatos y el fracaso de la policía para llevar a Dahmer ante la justicia debido al racismo y la homofobia es el tema de la reciente serie Dahmer – Monster: The Jeffrey Dahmer Story, producida por Ryan Murphy, que se estrenó a fines del mes pasado en Netflix.
La serie se convirtió en el programa número 1 en Netflix y, según Variety, fue el programa más comentado en las redes sociales la semana posterior a su lanzamiento.
La controvertida serie ha sido criticada por embellecer a Dahmer al elegir al colaborador frecuente de Murphy, Evan Peters, en el papel principal.
De hecho, la serie ha inspirado una tendencia reciente en TikTok en la que los usuarios de la plataforma de redes sociales han estado publicando videos que expresan su atracción e incluso simpatía por la interpretación de Peters de Dahmer.
Mientras tanto, los familiares de algunas de las víctimas de Dahmer expresaron su indignación por la serie, alegando que los había vuelto a traumatizar.
Tras la reacción violenta de los suscriptores, Netflix eliminó la etiqueta «LGBTQ+» de la serie.