Un hombre se presentó a la oficina de la policía en Jacksonville para confesar un crimen, haber matado a su amigo imaginario.
Geoff Gaylord, hizo lo que pocos asesinos hacen, se entregó a la policíay pidió que se le condenara a pena de muerte por su crimen. Pero al rendir su declaración sobre lo ocurrido, las autoridades no pudieron tomar en serio la confesión del hombre que se entregó voluntariamente a la justicia.
Gaylord, de 37 años de edad, confesó haber matado, descuartizado y enterrado a Mr. Happy, quien resultó ser su amigo imaginario. El hombrepidió a las autoridades que entendieran que el no era un asesino pero Mr. Happy «se lo buscó».
