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Milo Yiannopoulos ahora vende estatuas de la Virgen María

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¡Manas! No solo tenemas a Mauricio o Franco Clark en México, también existe una versión de él en Europa y se llama Milo Yiannopoulos.

El autodenominado «ex-gay» Milo Yiannopoulos se dejó ver en un canal de compras cristiano que vende estatuas de la Virgen María y demás artículos religiosos.

En un video para el canal de compras del sitio de noticias católico «Church Militant», se puede ver a Yiannopoulos describiendo una estatua de la Virgen María a la venta.

«Hay algunas Marías en las que la cara es desafortunada, no se han esforzado para asegurarse de que tenga la expresión y los rasgos correctos», dice en un clip tratando de convencer a los espectadores en adquirir una de las estatuillas.

En el video también se aprecia al que alguna vez fue un periodista reconocido, vendiendo una medalla de la Virgen María y un libro de meditaciones sobre María.

Yiannopoulos tuvo una vez una carrera lucrativa, aunque moralmente dudosa, como editor del sitio de extrema derecha «Breitbart».

Se vio obligado a renunciar a su cargo en 2017 después de hacer comentarios que parecían respaldar la pedofilia aunque después terminó disculpándose por ello.

La carrera periodística de Yiannopoulos ha estado en caída libre, ya que técnicamente nadie lo quiere contratar, y además está vetado de Facebook y Twitter por violar las reglas del discurso de odio.

Yiannopoulos vive ahora de promover terapias de conversión y ser «ex-gay»

En mayo de 2021, Yiannopoulos, quien supuestamente se casó con su novio de mucho tiempo en Hawai en 2017, se declaró a sí mismo como «ex-gay».

Ahora lanza su propia empresa de terapias de conversión en Florida y recientemente fue objeto de protestas por parte de los estudiantes de la Universidad Penn State.

«Esta (la clínica) ha sido la cosa más fácil para recaudar dinero para eso que he hecho», dijo a New York Post como respuesta de donde obtiene nuevos ingresos para subsistir.

«Existe una enorme demanda de esto entre las personas que creen que se han descarriado», añadió como si una orientación sexual fuera una «desviación».