Nadie puede negar que semana a semana, RuPaul´s Drag Race nos ofrece lo mejor de entretenimiento, entre increíbles vestuarios, maquillajes, pelucas y ocurrencias, sin embargo, fuera de todo el increíble arte que nos regalan estas reinas del Drag, hay historias conmovedoras.
Esta semana, Dusty Ray Bottoms fue un ejemplo inspirador de valentía, recordando su difícil viaje de formación para educar a la sociedad sobre el daño que las actitudes anti-LGBT pueden hacer. Durante una conversación con Blair St. Clair en el taller, Dusty reveló que cuando era más joven fue sometida a la llamada terapia de conversión: «Mis padres nunca me han visto en un espectáculo. No creo que alguna vez lleguen. Mi familia y yo ya no hablamos más. Mi familia ni siquiera sabe que estoy aquí», dijo Dusty.
Dusty reveló que luego de hablar abiertamente sobre su homosexualidad con su familia, sus padres tomaron la decisión de llevaro a la iglesia y exorcizarlo para «expulsar el demonio gay» que vivía en él.
Además de esta situación, Bottoms dijo que fue obligado a asistir a un campamento cuyo fin era mostrarles la forma correcta de vivir.