Nueva Zelanda se ha sumado al pequeño grupo de países que financia públicamente el PrEP.
La profilaxis previa a la exposición es un tratamiento de prevención del VIH, compuesto por el medicamento llamado Truvada que, si se toma a diario (PrEP), puede reducir el riesgo de ser portador de VIH en un 90 por ciento o más. Si bien el año pasado Nueva Zelanda anunció el cambio en la política y la distribución del medicamento, recién es notable el cambio en cuanto a la calidad de vida.
«Brindar acceso asequible a PrEP para quienes lo necesiten hará una enorme diferencia para aquellos que están en mayor riesgo de portar VIH. Es un salto gigantesco para nuestro ambicioso objetivo de terminar nuevos casos de VIH en Nueva Zelanda para el año 2025», dijo el director ejecutivo de la Fundación del SIDA de Nueva Zelanda (NZAF), el Dr. Jason Myers.
Ahora, una prescripción trimestral del medicamento costará $5 dólares, que mensualmente serían $1.20 dólares. Esta es una marcada diferencia de los $731 dólares mensuales que solía costar a los residentes de Nueva Zelanda. A la mayoría se les enviarían sus recetas para poder reducir el costo del tratamiento.