¿Estamos listxs para hablar en serio sobre intersexualidad? Alejandro Zuno nos lanza la pregunta con toda la sensibilidad, potencia y belleza de Un Mundo Para Mí, su más reciente película que no solo informa: también conmueve, desestigmatiza y nos pone frente al espejo como sociedad.
Después de su trabajo en El secreto del río y Tengo que morir todas las noches (sí, esas joyitas de Netflix y Amazon Prime), Zuno regresa con un largometraje que, sin miedo y con mucho corazón, nos lleva de la mano por una historia que muy pocas veces se ha contado desde la gran pantalla.
La trama gira en torno a una joven pareja que, tras el nacimiento de su bebé intersexual, se ve obligada a tomar decisiones médicas, personales y emocionales que marcarán no solo la vida de su hijx, sino también la suya como familia.
Lo que podría haber sido solo un drama hospitalario o un panfleto educativo se convierte, gracias a un guion honesto y actuaciones profundas, en una película poderosa que habla del amor como resistencia, del respeto a las corporalidades diversas y de lo absurdo (y doloroso) que puede ser vivir en un sistema que te exige encajar a toda costa.
El reparto es un acierto total. Mayra Hermosillo y Andrés Delgado nos regalan interpretaciones llenas de matices, acompañados por talentos como Silvia Navarro, Gerardo Trejoluna y Everardo Arzate.
Pero Un Mundo Para Mí no se queda solo en la pantalla. Es una película que incomoda, que lanza preguntas difíciles y que nos hace ver cómo muchas veces la medicina, la ciencia y hasta las leyes han sido cómplices en la imposición de una única forma “correcta” de ser.
¿Qué pasa cuando un cuerpo no entra en los binarios? ¿Qué consecuencias deja la asignación forzada de sexo? ¿Y qué hacemos como sociedad frente a todo esto? Spoiler: el silencio ya no es opción.
No por nada esta película forma parte de la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), además de competir por el Premio Maguey, dedicado a narrativas LGBTIQ+, y por el Premio Mezcal, que reconoce lo mejor del cine mexicano actual.
Un Mundo Para Mí es una de esas pelis que necesitas ver, sentir, comentar y volver a ver. Porque nos recuerda que amar, acompañar y permitir que cada quien decida sobre su propio cuerpo no debería ser una excepción, sino la regla. Y porque sí, en medio de tanto prejuicio, este mundo todavía puede (y debe) ser un mundo para todxs.
