Un hombre británico fue sentenciado a prisión después dejar que su amante muriera durante un encuentro sexual extremo y lleno de drogas.
Kevin Adams, de 54 años, se quedó dormido y dejó a su pareja, Dohoon Kim, de 36 años, atado y con una máscara de gas en la cara. Así fue como lo encontraron las autoridades ya sin vida en su casa.
En la autopsia, descubrieron que tenía un exceso de drogas en su cuerpo, lo cual provocó su muerte, al igual que la falta de respiración por la máscara.
Un jurado declaró culpable a Adams por asesinato por negligencia.