El Tribunal Constitucional de Uganda decidió no derogar la polémica «ley anti-LGBTQ», que contempla la pena de muerte para ciertos actos sexuales consensuados entre personas adultas del mismo sexo. 

Aunque se han anulado algunas disposiciones por conflicto con derechos humanos fundamentales, la esencia de la ley permanece intacta desde su aprobación en mayo del 2023.

La «ley anti-LGBTQ» de Uganda es una de las más severas a nivel mundial, imponiendo penas que van desde cadena perpetua hasta la pena de muerte por relaciones consentidas entre adultos del mismo sexo. 

La legislación también prohíbe la «promoción de la homosexualidad», castigando las infracciones con hasta 20 años de cárcel.

Esta legislación ha desatado fuertes críticas de organismos internacionales defensores de los derechos humanos, resultando en sanciones como la suspensión de préstamos por parte del Banco Mundial y restricciones de visados por parte de Estados Unidos contra funcionarios ugandeses. Se anticipan más sanciones debido a la reafirmación de la Corte Constitucional de Uganda.

Impacto en entre las personas de las poblaciones LGBTIQ+ de Uganda

Activistas reportan un aumento de abusos contra la comunidad LGBTIQ+, incluyendo torturas, violaciones, detenciones y desalojos, como resultado de esta ley.

Los activistas LGBTIQ+ de Uganda planean apelar la sentencia ante el Tribunal Supremo del país, buscando proteger los derechos individuales y la diversidad sexual en la nación africana.