Deja tú el asco, mana, ¡el miedo! El hombre que aparece en el vídeo se sorprendió mucho al encontrar una rana en su casa.
Cuando intentó tocar al pequeño animal, su sorpresa seguro que alcanzó un nivel totalmente distinto. Tan pronto como la tocó, la rana dejó escapar un grito agudo, como de gato..
Definitivamente no es el tipo de reacción que cualquiera hubiera esperado. ¡Qué mieda! ¡Que asca!